De camino mi único objetivo era taparme para minimizar los temblores que la fiebre producía. Por la ventana se oía la lluvia caer y sólo podía embobarme con la niebla que cubría el paisaje de vuelta.
Llevaba la cámara en el bolso, pero mis brazos no respondían. Así que cogí el móvil, e intenté captar esa neblina, que no sé si era fruto de mi cabeza o de la propia tormenta.
EXIF: iPhone 5; f 2.4; 1/390; ISO 50 Iluminación: Luz día nublado Postproducción: Niveles, brillo, y saturación. |
Espero que os guste.
Hasta mañana,
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