Siento como un niño, quiero jugar, quiero reír; pero ya no puedo. Me toca razonar, me toca parecer maduro, me toca conversar en las sobremesas con los mayores, me toca abrazar cuando están tristes.
Vivir en ese mundo de trabajo, preocupaciones, obligaciones me parece una mierda; pero no me queda otra. Es mi futuro. Prefiero estar solo, aislado de tanta contradicción.
Se que no me entienden. Pero nadie les ha pedido que lo hagan.
EXIF: Nikon D7000; 1/60; f 6.3; 50 mm; ISO 100; 0 EV Iluminación: Luz indirecta día y luz bombilla Postproducción: niveles, contraste, brillo, saturación, y recorte |
Hasta mañana,
¡Por Dios! se parece tanto el niño a una personita que conozco que me he quedado perplejo.
ResponderEliminarClaro que si lo piensas bien, hoy en dia hay tantos parecidos como modas juveniles. El móvil les delata a todos.
Nacer, crecer, desarrollarse y morir es la ley de la vida y parece que el Osito este atento con ojos muy abiertos observando el momento y delatando que se sigue siendo niño..
Se parece mucho a su padre...pero no a mi, no es mío_o_O_o; aunque le quiero como si lo fuera!!!!
EliminarPero te doy la razón en que el móvil enseña la moda juvenil, y ese osito sigue delatando su niñez...que espero tarde mucho en desaparecerle...;-((